Pasar gran parte del tiempo en el interior de los edificios ya sea en el trabajo, en los bares, en las discotecas, en nuestras propias casas, conlleva una mayor exposición a los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV).
¿Por qué son perjudiciales los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV)?
A continuación explicaremos qué son los Compuestos Orgánicos Volátiles, cómo afectan a nuestra salud y cómo podemos evitarlos en nuestra vida diaria.
Los COV son los principales contaminantes en el interior de los edificios y tienen un impacto significativo sobre la calidad del aire en su interior. Su concentración es hasta 10 veces superior en el interior de los edificios que en el exterior. Una larga exposición a estos compuestos orgánicos es perjudicial para nuestra salud y es uno de los factores causantes del Síndrome del Edificio Enfermo (SEE), según recoge la Environmental Protection Agency, EPA (“La agencia de protección medioambiental”) de EEUU.
Pero ¿En qué consisten los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV)?
Los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV ) son compuestos químico orgánicos, de origen natural o sintético, que presentan un punto de ebullición muy bajo, es decir, que se evaporan con facilidad. La volatilidad de estos compuestos, tanto sólidos o líquidos, hace que entren en contacto con el aire circundante inhalándolos con mayor facilidad.
Dichos compuestos son ampliamente utilizados como ingredientes en productos para el hogar: Pinturas, barnices y ceras, productos de limpieza, desinfectantes, cosméticos, desengrasantes y los combustibles de los vehículos (coches, aviones, trenes, barcos, etc)
Todos estos Compuestos Orgánicos Volátiles se liberan al aire cuando los estamos utilizando y, en cierto grado, cuando se almacenan. Por ejemplo, el formaldehido es un COV, presente en las pinturas, que tiene un punto de ebullición de -19 ºC. Eso nos indica que a temperatura ambiente estará en forma de vapor y podremos inhalarlo.
La mayoría de los aromas u olores que percibimos en los perfumes de uso personal o de limpieza presentan COV.
Los Compuestos Orgánicos Volátiles también juegan un papel importante en las plantas y en los mensajes de las plantas a los animales. Los olores fuertemente emitidos por muchas plantas son COV que se producen exclusivamente en las hojas verdes y sirven como un mecanismo de protección.
La emisión de dichos compuestos se ve afectada por una variedad de factores: la temperatura, la tasa de volatilización y crecimiento, la luz solar,… El principal COV que producen las plantas son los isoprenos. Por ejemplo los terpenos (dímeros del isopreno), tales como el mirceno (un monoterpeno), es un aceite esencial de varias plantas. Los terpenos son responsables, entre otras cosas, del olor de las plantas (incluyendo Laurus nobilis, cannabis, ylang-ylang, tomillo, perejil y lúpulo) y se utilizan comúnmente en la industria del perfume.
Pero no todos los COV son beneficiosos, muchos de ellos son dañinos para nuestra salud tanto para el ser humano como para el medio ambiente.
La Oficina de Investigación y Desarrollo «Total Exposure Assessment Methodology (TEAM) Study» («La Metodología de Evaluación total de la exposición”) de la EPA encontró niveles, de alrededor de una docena de contaminantes orgánicos comunes, de entre 2 a 5 veces mayor dentro de las casas que en el exterior, independientemente de si las casas estaban ubicadas en zonas rurales o zonas industriales.
Los estudios de TEAM indican que mientras la gente está utilizando productos que contienen COV se exponen a sí mismos, y a otros, a niveles muy altos de contaminantes. Estos contaminantes, a elevadas concentraciones, pueden permanecer en el aire durante más tiempo incluso después de ser utilizados.
¿Cuáles son las fuentes de estos Compuestos Orgánicos Volátiles (COV)?
Podéis consultar la Tabla que nos indica diferentes materiales y los COV que se evaporan de ellos.
Según recoge la Environmental Protection Agency (EPA), estos son los materiales que contienen los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV):
- Productos para el hogar, incluyendo:
– Pinturas, pegamentos o adhesivos
El cloruro de metileno se puede encontrar en: decapantes de pintura, productos para eliminar los pegamentos o adhesivos y en pinturas pulverizadas en aerosoles. Se sabe que causa cáncer en animales y, en el cuerpo humano, se metaboliza a monóxido de carbono (CO) y puede causar síntomas asociados con la exposición a dicho gas.
Muchos materiales de construcción tales como pinturas, adhesivos, placas de pared y las tejas del techo emiten lentamente formaldehído, que irrita las membranas de las mucosas. La humedad relativa y la temperatura favorecen la volatilización de este compuesto.
– Conservantes de la madera
Los COV artificiales se utilizan en recubrimientos de pinturas y protectores. Se requieren disolventes para aplicar una película protectora o decorativa en cualquier tipo de mueble. Los disolventes típicos son hidrocarburos alifáticos, acetato de etilo, éteres de glicol, y acetona. El uso de disolventes a base de agua se está empezando a utilizaran en la industria de las pinturas.
– Aerosoles.
– Productos de limpieza y desinfección
Los clorofluorocarbonos, que están prohibidos o altamente regulados, están presente en los productos de limpieza y refrigerantes.
– Repelentes de polillas y ambientadores.
– Combustibles almacenados y productos para el automóvil.
El uso de combustibles fósiles produce COV, ya sea directamente como productos (por ejemplo, gasolina) o indirectamente como subproductos (por ejemplo, los gases de escape de automóviles). Uno de los COV carcinógenos para el ser humano es el benceno, presente en el humo ambiental del tabaco, combustibles almacenados, y en el escape de los automóviles. Se utiliza con frecuencia para fabricar otros productos químicos en la producción de plásticos, resinas y fibras sintéticas.
– La ropa de la tintorería.
El percloroetileno se utiliza sobre todo en la limpieza en seco. Aunque algunas tintorerías reutilizan el COV recuperado, es inevitable su liberación al medio ambiente. El Tetracloroeteno se utiliza ampliamente en la limpieza en seco y por la industria.
– Pesticida.
- Otros productos, incluyen:
– Materiales de construcción y muebles.
– Equipo de oficina, tales como fotocopiadoras e impresoras, líquidos de corrección, etc.
– Materiales gráficos y de artesanía incluyendo colas y adhesivos, marcadores permanentes y soluciones fotográficas.
– Humo del tabaco.
¿Qué efectos tiene sobre nuestra salud los COV?
Los efectos pueden incluir:
– Irritación de ojos, nariz y garganta.
– Dolores de cabeza, pérdida de la coordinación y náuseas.
– Daño al hígado, riñón y sistema nervioso central.
– Algunos compuestos orgánicos pueden causar cáncer en animales, e incluso se sospecha o se sabe que causan cáncer en los seres humanos.
Los signos o síntomas claves asociados con la exposición a compuestos orgánicos volátiles (COV) incluyen: Irritación en los ojos, la nariz y garganta; dolor de cabeza; reacción alérgica en la piel; disnea; disminución de los niveles de colinesterasa en suero; náusea; emesis; epistaxis; fatiga y mareo.
La capacidad de los COV para causar en efectos de salud varía en gran medida desde aquellos que son altamente tóxicos a otros con efectos aún no conocidos.
Al igual que con otros contaminantes, el grado y la naturaleza del efecto sobre la salud dependerán de muchos factores, incluyendo el nivel y el tiempo de exposición.
En la actualidad, no se sabe mucho acerca de los efectos que produce en la salud los niveles de Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) que se encuentran normalmente en los hogares. Si se conoce que la concentración de COV en un ambiente interior durante el invierno es de tres a cuatro veces mayor que durante el verano. Los altos niveles de COV en el interior se atribuyen a la mala ventilación, a la presencia de ventanas más hermética y al uso de humificadores.
¿Qué puedo hacer para reducir los niveles de COV en mi hogar?
Según la EPA, las medidas que debemos seguir para reducir la exposición a estos COV son las siguientes:
– Aumentar la ventilación cuando se utilizan productos que emiten dichos compuestos.
– Seguir las indicaciones de las etiquetas.
– No almacenar los envases abiertos de pintura no utilizados y materiales similares dentro de la casa.
– El formaldehído, uno de los COV más conocidos, es uno de los pocos contaminantes del aire interior que se pueden medir fácilmente. Identificar, y si es posible, eliminar la fuente.
– Reducir la necesidad de pesticidas.
– Utilizar productos para el hogar de acuerdo con las instrucciones del fabricante.
– Asegurarse de ventilar bien cuando utilicemos dichos productos.
– Tirar a la basura los envases no utilizados y comprar las cantidades que se vaya a utilizar en ese momento.
– Mantener dichos productos fuera del alcance de los niños y las mascotas.
– Nunca mezclar productos para el cuidado del hogar a menos que lo indica la etiqueta.
Aunque la solución a este problema sería instalar en los edificios sistemas de ventilación o de eliminación de estas sustancias nocivas, existe otro método alternativo sencillo y económico, además al alcance de todos: “Las Plantas”
Hay investigaciones que demuestran que las plantas reducen las concentraciones ambientales de COV, es decir, que es posible reducir los niveles de Compuestos Orgánicos Volátiles en nuestras casa como en nuestros hogares.
En resumen:
Comprar plantas para tu hogar y para tu trabajo, salir a la calle y hacer ejercicio al aire libre es lo mejor para tu salud
¿Te animas a comprar plantas y evitar así los Compuestos Orgánicos Volátiles?
Cuida de tu salud, de tu hogar y de la gente que te rodea.
Creación, Redacción y Edición del Vídeo: Mónica Blanco Freijo